ESTRATEGIA PARA EL CRECIMIENTO: SABIDURÍA

Hecho: La mayoría de los líderes quieren crecer, pero no tienen una estrategia para hacerlo.

Perspectiva: La mayoría de los líderes desean crecer, pero muchos carecen de la estrategia para lograrlo. Confían únicamente en la oración, creyendo que la oración en sí misma es la estrategia. Si bien la oración es esencial, no debe utilizarse como sustituto de la planificación y la acción. En cambio, la oración debe ser el medio a través del cual recibimos la sabiduría y la dirección de Dios. Los líderes no deben limitarse a orar para que Dios construya su visión; deben buscar el plan de Dios para construirla ellos mismos. El propósito de la oración no es solo recibir poder, sino recibir la sabiduría de Dios. 

La verdadera oración es un diálogo: nosotros hablamos con Dios y Él nos responde.

PERSPECTIVA #1

La oración debe conducir a la estrategia

  • La oración tiene como objetivo proporcionar empoderamiento, favor y estrategia. 
  • Los líderes deben orar por el plan de Dios, no solo por los resultados.
  • La verdadera oración es un diálogo que trae sabiduría divina.
  • Santiago 1:5 (Ntv) Si necesitan sabiduría, pídansela a nuestro generoso Dios, y él se la dará; no los reprenderá por pedirla. 

    NEHEMÍAS: ORAD, LUEGO ACTUAD

    • Nehemías demuestra cómo se debe usar la oración para obtener una estrategia. Al enterarse de que las murallas de Jerusalén estaban en ruinas y que su pueblo sufría angustia, no se limitó a orar para que Dios las reconstruyera.

    Nehemías 1:4 (NTV) Cuando oí esto, me senté a llorar. De hecho, durante varios días estuve de duelo, ayuné y oré al Dios del cielo, 

    Pregunta: ¿Por qué oró y ayunó Nehemías?

    Respuesta: Oró y ayunó para recibir una revelación divina de sabiduría y dirección (Nehemías 1:4-11).

  • Cuando Nehemías terminó de orar, tenía una estrategia bien pensada y un plan de acción. Cuando se acercó al rey, no se limitó a pedir ayuda, sino que le presentó un plan detallado. El rey le preguntó por el calendario y Nehemías le dio una respuesta clara. Esto demuestra que Nehemías había calculado cuánto tiempo llevaría y había tenido en cuenta todos los detalles necesarios. 
  • Hecho: Dios no solo le concedió su favor, sino también un plan para reconstruir los muros de Jerusalén.

    Nehemías 2:4-8 (NTV) El rey preguntó: —Bueno, ¿cómo te puedo ayudar? Después de orar al Dios del cielo, contesté: —Si al rey le agrada, y si está contento conmigo, su servidor, envíeme a Judá para reconstruir la ciudad donde están enterrados mis antepasados. El rey, con la reina sentada a su lado, preguntó: —¿Cuánto tiempo estarás fuera? ¿Cuándo piensas regresar? Después de decirle cuánto tiempo estaría ausente, el rey accedió a mi petición. Además le dije al rey: —Si al rey le agrada, permítame llevar cartas dirigidas a los gobernadores de la provincia al occidente del río Éufrates, indicándoles que me permitan viajar sin peligro por sus territorios de camino a Judá. Además, le ruego que me dé una carta dirigida a Asaf, el encargado del bosque del rey, con instrucciones de suministrarme madera. La necesitaré para hacer vigas para las puertas de la fortaleza del templo, para las murallas de la ciudad y para mi propia casa. Entonces el rey me concedió estas peticiones porque la bondadosa mano de Dios estaba sobre mí. 


    PERSPECTIVA #2

    El propósito de la oración en el liderazgo

    • La oración tiene como objetivo el empoderamiento, el favor y la estrategia. Nadie puede construir una casa, un negocio o un ministerio solo con la oración. Aunque la oración es poderosa, los líderes deben comprender por qué deben orar:
        • Sabiduría para liderar con eficacia.
        • Organización y estructura.
        • Trabajadores cualificados para cubrir los puestos necesarios.

    Santiago 1:5 (NTV) Amados hermanos, cuando tengan que enfrentar cualquier tipo de problemas, considérenlo como un tiempo para alegrarse mucho.

    PERSPECTIVA #3

    La necesidad de una estructura para el crecimiento

    • Salomón, al igual que Nehemías, no solo oró por el éxito, sino que también oró por sabiduría. Le pidió a Dios la capacidad de liderar y organizar a las personas de manera eficaz. Como resultado, su liderazgo se caracterizó por el orden divino, y todos ocuparon el lugar que les correspondía.
    1 Reyes 3:9-12 (NLT) Dame un corazón comprensivo para que pueda gobernar bien a tu pueblo, y sepa la diferencia entre el bien y el mal. Pues, ¿quién puede gobernar por su propia cuenta a este gran pueblo tuyo? Al Señor le agradó que Salomón pidiera sabiduría. Así que le respondió: —Como pediste sabiduría para gobernar a mi pueblo con justicia y no has pedido una larga vida, ni riqueza, ni la muerte de tus enemigos, ¡te concederé lo que me has pedido! Te daré un corazón sabio y comprensivo, como nadie nunca ha tenido ni jamás tendrá. 
    • Sin orden, el crecimiento es imposible. Los líderes deben hacer algo más que orar por la expansión; deben rezar por la capacidad de gestionarla.
    Pregunta: ¿Por qué enviaría Dios más líderes y siervos si no hay lugar para ellos? Respuesta: Dios no envía a las personas solo para que observen; las envía para que se desarrollen. Muchos líderes desean tener una multitud, pero el verdadero propósito del liderazgo es desarrollar a los demás. El crecimiento sin estructura conduce al caos.
    • La iglesia primitiva entendía este principio. Tenían una estructura: se reunían en casas, nombraban líderes para supervisar la distribución de alimentos e implementaban sistemas para llevar un control del número de personas.
    Hechos 6:2-4 (NTV) De manera que los Doce convocaron a todos los creyentes a una reunión. Dijeron: Nosotros, los apóstoles, deberíamos ocupar nuestro tiempo en enseñar la palabra de Dios, y no en dirigir la distribución de alimento. Por lo tanto, hermanos, escojan a siete hombres que sean muy respetados, que estén llenos del Espíritu y de sabiduría. A ellos les daremos esa responsabilidad. Entonces nosotros, los apóstoles, podremos dedicar nuestro tiempo a la oración y a enseñar la palabra. 

    PERSPECTIVA #4

    El peligro del éxito sin sabiduría

    • Perspectiva: Uno de los mayores peligros a los que se enfrentan los líderes es el propio éxito. Cuando las cosas van bien, es fácil dar por sentado que todo lo que hacemos es correcto.
    1 Corintios 10:12 (NTV) Si ustedes piensan que están firmes, tengan cuidado de no caer. 

    • Esta falsa creencia puede conducir a la complacencia y a la toma de decisiones erróneas. El exceso de confianza y el descuido pueden destruir en un instante lo que ha costado años construir.
    • Muchos ministerios y empresas han fracasado porque sus líderes no supieron mantener una actitud humilde y diligente en su enfoque.
    • El éxito no debe generar arrogancia, sino cultivar una mayor humildad. Los líderes sabios se rodean de asesores, siguen meticulosamente los detalles y se mantienen fieles a los principios fundamentales.

    CONCLUSIÓN: MANTÉNGASE HUMILDE, MANTÉNGASE ESTRATÉGICO

    • El crecimiento no es accidental, es intencional. Los líderes deben ir más allá de simplemente orar por el éxito y comenzar a buscar a Dios para obtener sabiduría, estructura y estrategia.

    • Ora, pero también planea.

    • Busca sabiduría no solo el poder. 

    • Construye una estructura que pueda sostener el crecimiento.

    • Mantén la humildad, incluso en el éxito.

    • Ten cuidado con el exceso de confianza y busca siempre consejo sensato. Una sola decisión imprudente puede echar por tierra años de duro trabajo. Ten éxito, pero mantén la humildad.
    • El crecimiento está garantizado para aquellos que aplican la sabiduría a su liderazgo.

    Proverbios 15:22 (NLT) Los planes fracasan por falta de consejo; muchos consejeros traen éxito.