UN LÍDER QUE ORA (PT. 3)

4 LECCIONES DE UN LÍDER ORANTE: DANIEL

Daniel 6:1-10 (NLT) Darío el medo decidió dividir el reino en ciento veinte provincias y nombró a un alto funcionario para gobernar cada provincia. Asimismo, el rey escogió a Daniel y a dos personas más como administradores para que supervisaran a los altos funcionarios y protegieran los intereses del rey. Pronto Daniel demostró ser más capaz que los otros administradores y altos funcionarios. Debido a la gran destreza administrativa de Daniel, el rey hizo planes para ponerlo frente al gobierno de todo el imperio. Entonces los demás administradores y altos funcionarios comenzaron a buscar alguna falta en la manera en que Daniel conducía los asuntos de gobierno, pero no encontraron nada que pudieran criticar o condenar. Era fiel, siempre responsable y totalmente digno de confianza. Finalmente llegaron a la siguiente conclusión: «Nuestra única posibilidad de encontrar algún motivo para acusar a Daniel será en relación con las normas de su religión». Así que los administradores y los altos funcionarios se presentaron ante el rey y dijeron: «¡Que viva el rey Darío! Todos nosotros —administradores, autoridades, altos funcionarios, asesores y gobernadores— nos hemos puesto de acuerdo en que el rey apruebe una ley que se haga cumplir estrictamente. Ordene usted que, en los próximos treinta días, todo aquel que ore a quien sea, divino o humano —excepto a usted, su majestad—, sea arrojado al foso de los leones. Ahora bien, su majestad, emita y firme esta ley de tal modo que no pueda ser alterada, una ley oficial de los medos y de los persas que no puede ser revocada». Así que el rey Darío firmó la ley. Sin embargo, cuando Daniel oyó que se había firmado la ley, fue a su casa y se arrodilló como de costumbre en la habitación de la planta alta, con las ventanas abiertas que se orientaban hacia Jerusalén. Oraba tres veces al día, tal como siempre lo había hecho, dando gracias a su Dios. 

La oración es una asociación con Dios. 

  • La oración es colaborar con Dios para cumplir una tarea sobrenatural.
  • Todo es posible con Dios. Todo es imposible sin Dios. Dios nos llama a hacer lo imposible y no podemos hacerlo sin Él.
  • No olvidemos que nuestra misión es rescatar personas.

LECCIÓN #1: LA ORACIÓN NOS HACE SABIOS Y NOS ANIMA A LIDERAR.

No podemos ser sabios y no ascender. Lo que más se demanda hoy en día son líderes sabios. La sabiduría nos da influencia. Cuando gestionamos bien las áreas y las personas que Dios nos ha dado, siempre conduce al crecimiento personal, al crecimiento organizacional y al ascenso.

Daniel 6:1-3 (NTV) Darío el medo decidió dividir el reino en ciento veinte provincias y nombró a un alto funcionario para gobernar cada provincia. Asimismo, el rey escogió a Daniel y a dos personas más como administradores para que supervisaran a los altos funcionarios y protegieran los intereses del rey. Pronto Daniel demostró ser más capaz que los otros administradores y altos funcionarios. Debido a la gran destreza administrativa de Daniel, el rey hizo planes para ponerlo frente al gobierno de todo el imperio. 

Gran capacidad: («Espíritu de excelencia» ruah/yatir) una mente excelente, extraordinaria, preeminente, hábil, con una calidad de pensamiento que va más allá de lo habitual o común, de carácter excepcional, sobresaliente, poco común.



Perspectiva: Promociona lo probado, no el potencial de lo no probado.

A. LA ORACIÓN NOS HACE SABIOS PORQUE NOS ASOCIAMOS CON DIOS Y CON TODA SU SABIDURÍA Y SU FAVOR.

Empieza a ser excelente donde estás y tendrás la garantía de que Dios y los demás te ascenderán. La sabiduría nos lleva al éxito.

Genesis 39:2-4 (NTV) El Señor estaba con José, por eso tenía éxito en todo mientras servía en la casa de su amo egipcio. Potifar lo notó y se dio cuenta de que el Señor estaba con José, y le daba éxito en todo lo que hacía. Eso agradó a Potifar, quien pronto nombró a José su asistente personal. Lo puso a cargo de toda su casa y de todas sus posesiones. 

B. NO PODEMOS PASAR TIEMPO CON EL SEÑOR EN ORACIÓN SIN QUE LOS DEMÁS LO NOTEN.

Y viceversa. No podemos dejar de dedicar tiempo a la oración sin que se note.

Hechos 4:13 (NTV) Los miembros del Concilio quedaron asombrados cuando vieron el valor de Pedro y de Juan, porque veían que eran hombres comunes sin ninguna preparación especial en las Escrituras. También los identificaron como hombres que habían estado con Jesús. 

C. LA SABIDURÍA QUE RECIBIMOS DEL SEÑOR EN LA ORACIÓN NOS PROTEGE DE LA PÉRDIDA, EL DAÑO Y LA AUTODESTRUCCIÓN.

Protege a nuestra familia, matrimonios, negocios, ministerios, integridad, decisiones, finanzas, etc. El rey puso a Daniel a cargo de proteger sus intereses porque demostró ser digno de confianza, sabio y competente. Daniel demostró ser más capaz que los demás administradores.

Proverbios 2:10-11 (NTV) Pues la sabiduría entrará en tu corazón, y el conocimiento te llenará de alegría. Las decisiones sabias te protegerán; el entendimiento te mantendrá a salvo. 

D. SI ORAMOS POR SABIDURÍA, DIOS NOS LA DARÁ; SI NO ORAMOS POR ELLA, NO LA RECIBIREMOS.

Santiago 1:5 (NTV) Si necesitan sabiduría, pídansela a nuestro generoso Dios, y él se la dará; no los reprenderá por pedirla.